viernes, 3 de julio de 2015

Por favor, no nos conformemos a este siglo....

Pareciera que todos los días vivimos para recibir "likes", esto puede sonar bastante extremo, pero las redes sociales han revolucionado la manera en que los seres humanos manifestamos nuestra necesidad de "encajar", de ser aprobados por los demás, de sentir que existen más como nosotros, de sentirnos parte de algo, de no sentirnos solos.

Cuando subo alguna foto o pensamiento a mi muro de FB o a alguna otra cuenta, se siente muy bonito recibir decenas o cientos de "me gusta", sobre todo cuando ni siquiera ha pasado el primer minuto y mis "amigos" ya están "aprobándome" con sus comentarios positivos, con sus "aplausos virtuales". A nadie le gusta subir algo y no recibir nada, cero, ni siquiera un "dislike" jeje! Odiamos el rechazo y lo que es peor, el silencio. Por algo, en muchas ocasiones, nos atrevemos a subir a un foro público lleno de conocidos y desconocidos, hasta nuestros pensamientos más profundos, pensando que allá afuera habrá alguien que tal vez necesite leer, reflexionar, identificarse o hasta reírse con nosotros.

Amamos sentirnos aprobados, es una necesidad profunda de nuestro corazón, pero esto se puede tornar riesgoso cuando por el afán de conseguir esos "aplausos", como hijos de Dios, acallamos al mismo Espíritu Santo que mora dentro de nosotros, esa voz interior, llena de sabiduría y justicia, que habla no solo a tu mente, y a tu corazón, sino que va directamente a tu espíritu. Estamos viviendo en días llenos de claro-oscuros, grises, donde nadie sabe distinguir entre el bien y el mal, donde a lo malo le llaman bueno y a lo bueno malo. Y aquellos que conocemos personalmente  a EL CAMINO, LA VERDAD Y LA VIDA tenemos temor de darlo a conocer porque sabemos que no vamos a recibir tantos aplausos, por temor a ser rechazados. El rechazo de los demás no se siente bien, no importa la edad que tengas, a nadie le gusta!

Por eso hace muchos siglos un médico llamado Lucas dijo: "ay de ustedes, cuando todos los hombres hablen bien de vosotros" y yendo más lejos proclamó "bienaventurado serás cuando los hombres te aborrezcan y cuando se aparten de tí y te vituperen y desechen tu nombre como malo, por causa del Hijo del Hombre, gózate en aquel día y alégrate porque he aquí tu galardón es grande en los cielos!!"

Existe en la mente de Aquel que nos amó desde el principio y que nos aprueba más que millones de "likes" juntos, un plan de amor y redención hacia la humanidad para este tiempo y nosotros que estamos vivos y que le conocemos, somos parte de ese plan, es tiempo de decidir por quien queremos ser aprobados y levantar nuestra voz, nuestras manos y nuestro corazón para sus propósitos.

No nos conformemos pues con los aplausos terrenales, los celestiales son mejores, pues tienen consecuencias ETERNAS!!